Cuando empecé a publicar este blog sólo tenía claro que quería hablar sobre la comida y –de una manera tangencial– de mi relación con ella. Poco a poco las ideas se van concretando alrededor de unos cuantos temas, aunque también es cierto que lo considero un organismo vivo (de alguna extraña manera) y por tanto cambiante.
Básicamente, podríamos decir que se va estructurando en tres bloques principalmente, aunque no son fijos ni tengo la intención de que o sean:
1 Compartir recetas sencillas o explicadas tan claramente como pueda, para que los amigos se lancen a cocinar como si no hubiese un mañana. Es un camino y como tal, no se sabe hacia dónde te lleva, pero el viaje merece la pena. Alguien decía en alguna parte que “cocinar mola”. Yo voy más allá y creo que es un acto mágico. Al fin y al cabo, quien cocina alimenta a la tribu, ¿no?
2 Publicar noticias relacionadas con la comida: novedades, productos, curiosidades, eventos varios, tontás, la vida pública de F. Adriá y de su fabulosa cuchara,...
3 Y en último lugar, pero no lo último, algo de información sobre lo que comemos: de dónde viene, cómo se produce, cómo se procesa... Tengo la impresión de que los españoles hablamos poco de comida. Cocinamos bastante, vamos a restaurantes, nos comemos millones de tapas y raciones en esos bares de Dios, pero… ¿Nos interesamos por lo que comemos? Da la impresión de que hay mucha información, pero dispersa. Desinformación, más bien. Me recuerda a aquello de que el gran triunfo del Demonio ha sido hacernos creer que no existe. No sé si me explico.
Un poco en este sentido, me gustaría compartir con vosotros un enlace a un programa que se emitió en el canal Cuatro dentro de su programa REC: ¿Sabemos lo que comemos?
En el reportaje se nos muestra (en algunos casos sólo se intenta) cómo se procesan distintos alimentos básicos en España: pan, cerdo, tomate, leche y huevos. Se supone que éstos son los alimentos que más se consumen en nuestro país.
A mí, en general, me parece flojo. Podría haber sido más riguroso, haber hecho hincapié en cosas como los alimentos transgénicos, haber buscado más alternativas y no darse por vencido a la primera dificultad… Pero tiene sus cosas buenas, ¡eh! (Si no lo creyese, no lo compartiría con vosotros).
Su principal virtud es que es uno de los pocos documentales que he visto que hablan sobre la industria alimentaria en España. Es fácil encontrar montones que nos cuentan cosas sobre industrias lejanas o malvadas multinacionales, pero es importante poder enfocar sobre algo cercano.
En cuanto a lo malo… Pues que es blandito. Lo achaco a varios factores. Falta de tiempo para elaborar el material y falta de arrestos para hablar de marcas concretas. Seguramente, porque esas mismas marcas son las que pagan a la cadena una buena cantidad en publicidad. Las emisoras de TV viven del anunciante y eso mata al reportaje. O al menos lo hiere gravemente.
Aún así, y dando por sentado que no somos consumidores inocentes, espero que os guste. O mejor aún, que os haga pensar.
Un abrazo
Básicamente, podríamos decir que se va estructurando en tres bloques principalmente, aunque no son fijos ni tengo la intención de que o sean:
1 Compartir recetas sencillas o explicadas tan claramente como pueda, para que los amigos se lancen a cocinar como si no hubiese un mañana. Es un camino y como tal, no se sabe hacia dónde te lleva, pero el viaje merece la pena. Alguien decía en alguna parte que “cocinar mola”. Yo voy más allá y creo que es un acto mágico. Al fin y al cabo, quien cocina alimenta a la tribu, ¿no?
2 Publicar noticias relacionadas con la comida: novedades, productos, curiosidades, eventos varios, tontás, la vida pública de F. Adriá y de su fabulosa cuchara,...
3 Y en último lugar, pero no lo último, algo de información sobre lo que comemos: de dónde viene, cómo se produce, cómo se procesa... Tengo la impresión de que los españoles hablamos poco de comida. Cocinamos bastante, vamos a restaurantes, nos comemos millones de tapas y raciones en esos bares de Dios, pero… ¿Nos interesamos por lo que comemos? Da la impresión de que hay mucha información, pero dispersa. Desinformación, más bien. Me recuerda a aquello de que el gran triunfo del Demonio ha sido hacernos creer que no existe. No sé si me explico.
Un poco en este sentido, me gustaría compartir con vosotros un enlace a un programa que se emitió en el canal Cuatro dentro de su programa REC: ¿Sabemos lo que comemos?
En el reportaje se nos muestra (en algunos casos sólo se intenta) cómo se procesan distintos alimentos básicos en España: pan, cerdo, tomate, leche y huevos. Se supone que éstos son los alimentos que más se consumen en nuestro país.
A mí, en general, me parece flojo. Podría haber sido más riguroso, haber hecho hincapié en cosas como los alimentos transgénicos, haber buscado más alternativas y no darse por vencido a la primera dificultad… Pero tiene sus cosas buenas, ¡eh! (Si no lo creyese, no lo compartiría con vosotros).
Su principal virtud es que es uno de los pocos documentales que he visto que hablan sobre la industria alimentaria en España. Es fácil encontrar montones que nos cuentan cosas sobre industrias lejanas o malvadas multinacionales, pero es importante poder enfocar sobre algo cercano.
En cuanto a lo malo… Pues que es blandito. Lo achaco a varios factores. Falta de tiempo para elaborar el material y falta de arrestos para hablar de marcas concretas. Seguramente, porque esas mismas marcas son las que pagan a la cadena una buena cantidad en publicidad. Las emisoras de TV viven del anunciante y eso mata al reportaje. O al menos lo hiere gravemente.
Aún así, y dando por sentado que no somos consumidores inocentes, espero que os guste. O mejor aún, que os haga pensar.
Un abrazo
Hola!!! Voy un poco pillada de tiempo porque me tengo que ir a preparar la cena, pero me dejo pendiente ver el documental, que parece interesante. Y es que, desde que hace unos años me diagnosticaron intolerancia a la lactosa, me intereso bastante por qué es lo que nos llevamos a la boca. Aún me sorprendo encontrando lactosa en el proceso de fabricación del alimento más insospechado.
ResponderEliminarVamos, qué me gusta este capítulo del blog!!
A mí me pasó como a tí, que me pareció blando blando.
ResponderEliminarLa única reflexión interesante creo que fue aquella de cuánto tiempo dedicamos a hacer la compra y cocinar...
Tienes razón en lo que dices de que era un programa para una tv y lo q eso implica! de todos modos creo que de lo que más adolece es de falta de análisis.
En cualquier caso, yo tb recomiendo verlo, total, para lo que habitualmente hay en la tele no está mal :D
Mer: muchas gracias. Me alegro mucho de que te guste.
ResponderEliminarHolly: estoy muy de acuerdo contigo en varias cosas. El poco tiempo que le podemos dedicar a la compra (porque hay poco tiempo y porque no te puedes leer todas la etiquetas de lo que compras si quieres ser una persona sana) es un factor determinante. Por eso hay que exigir productos que no nos dañen.
En cuanto al propio reportaje, bueno, supongo que también es importante que emitan este tipo de cosas, ya sea por convicción o porque está de moda. Siempre queda algo.
Un abrazo